La noche de San Patricio trajo mas de un hecho que tendrá repercusiones en los eventos futuros. Una revelación inesperada, una confirmación de la sospecha y una historia a la cual no voy a volver a continuar. Esta ultima es algo que me tiene sin cuidado, el pasado ha quedado en el pasado y como dije esa noche, seguiremos caminos diferentes. Pero las dos primeras me preocupan. Que he de hacer con esta revelación? Por ahora, nada. Y con la sospecha? Ja, ojalá fuera tan fácil como las otras.
Confirmar que mis sospechas eran acertadas, no me deja más tranquilo. Es como si pudiera leer las mentes. Es como si supiera lo que el resto piensa y opina sobre mí. Confirme que es cierto lo que “leía en sus mentes”. Ahora cierran en el esquema, algunos comentarios, actitudes y contestaciones. Y conozco la raíz de ello, en parte es mi culpa. Yo di lugar, quizás demasiado. Bueno, en principio, lo primero que haré, será cerrar las puertas. Gracias amigos, por escucharme. Nunca me hice entender, se ve que estoy muy equivocado con respecto a como actúo. Este entredicho con mis sentimientos, lo siento.
Me duele todo el cuerpo. El entrenamiento es mas duro ahora y yo me exijo mas y mas. Mi cuerpo dolorido y mi espíritu que flaquea, tengo que tener la fuerza para resistir todo. Sigo repitiéndome: “Aunque todas las deidades me abandonen...”, frase que me alienta en este momento en que me siento tan solo, como solo una vez me sentí.
Confirmar que mis sospechas eran acertadas, no me deja más tranquilo. Es como si pudiera leer las mentes. Es como si supiera lo que el resto piensa y opina sobre mí. Confirme que es cierto lo que “leía en sus mentes”. Ahora cierran en el esquema, algunos comentarios, actitudes y contestaciones. Y conozco la raíz de ello, en parte es mi culpa. Yo di lugar, quizás demasiado. Bueno, en principio, lo primero que haré, será cerrar las puertas. Gracias amigos, por escucharme. Nunca me hice entender, se ve que estoy muy equivocado con respecto a como actúo. Este entredicho con mis sentimientos, lo siento.
Me duele todo el cuerpo. El entrenamiento es mas duro ahora y yo me exijo mas y mas. Mi cuerpo dolorido y mi espíritu que flaquea, tengo que tener la fuerza para resistir todo. Sigo repitiéndome: “Aunque todas las deidades me abandonen...”, frase que me alienta en este momento en que me siento tan solo, como solo una vez me sentí.
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